El pasado 21 de Enero se cumplieron dos años desde que se encontró el primer caso del nuevo coronavirus de 2019 (COVID-19) en Washington y en los Estados Unidos. Nuestro estado lideró a la nación en los primeros días de la respuesta a la pandemia mediante la proactividad, la transparencia y la firmeza en su lucha para proteger a las personas contra este virus de rápida propagación.
En los últimos dos años, nuestras vidas cambiaron drásticamente en la escuela, el trabajo y en casa. Muchos días festivos y eventos especiales tuvieron que suspenderse hasta que hubiera disponibles «opciones más seguras». A principios de 2021, mientras reflexionábamos sobre el año de la pandemia, fuimos observando que empezaba a haber vacunas contra la COVID-19 en nuestras comunidades, lo cual nos causó una sensación de seguridad. A medida que más personas se vacunaban, los negocios iban reabriendo sus puertas, los niños regresaban a las aulas y las personas retomaban su vida cotidiana. Luego, tan solo unos meses después aparecieron los refuerzos, ya que las nuevas variantes amenazaban con hacernos retroceder en las medidas.
Ahora, mientras miramos hacia atrás a los dos años de respuesta a la pandemia, podemos decir que estamos orgullosos de las innumerables vidas que se salvaron gracias a las asociaciones dentro del sistema de salud pública y cercanas a este. Queremos agradecerles a todas las personas que hicieron algo para que sus vecinos estuvieran un poco más a salvo durante esta época sin precedentes.