Es normal para una madre que recién dio a luz o para una futura madre esmerarse para protegerse a sí misma y a su bebé. Esto es parte de lo que hace que el embarazo y el parto sean estresantes, incluso en tiempos normales. Pasar por un embarazo durante una pandemia puede ser aún más difícil.
Organizaciones médicas como Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, (CDC), el Colegio estadounidense de ginecólogos y obstetras(American College of Obstetricians and Gynecologists) (solo en inglés) y la Sociedad para la Medicina Materno-Fetal (Society for Maternal-Fetal Medicine) (solo en inglés) recomiendan la administración de la vacuna contra el COVID-19 para las personas embarazadas o que planean estarlo. Sin embargo, en los EE. UU. solo alrededor del 32 por ciento de las personas embarazadas (solo en inglés) entre las edades de 18 a 49 años han sido completamente vacunadas, a pesar del aumento de casos del COVID-19
Para una reciente o futura madre, la desinformación sobre la vacuna puede ser difícil de superar, aun con la orientación de grupos médicos de confianza. A veces, es necesario escuchar testimonios acerca de la vacunación directamente de alguien que lo ha vivido en carne propia.
En la entrevista de hoy les presentamos a Ana Coburn, una orgullosa nueva mamá que trabaja como enfermera de parto en Spokane. Ana se vacunó mientras amamantaba, meses después de dar a luz.
Gracias por hablar con nosotros, Ana. Pasemos a la entrevista. ¿Qué te hizo tomar la decisión de vacunarte como madre primeriza?
Hay muchos factores que influyeron en mi decisión. Estaba especialmente preocupada por mi salud y la de mi familia y deseaba mantenernos seguros.
Como madre, quieres hacer todo lo posible para mantener a tus hijos seguros. Hay tantas cosas peligrosas y terribles en este mundo sobre las que uno no tiene ningún control; y no hay forma de brindarle protección a un hijo. El COVID-19 es una de esas cosas peligrosas y terribles, por lo cual tuve que tomar una decisión definitiva para proteger a mi hija.
¿Cómo influyó el trabajo que tienes como enfermera de partos tu decisión?
Como proveedora de atención médica, tengo la responsabilidad de proteger a mis pacientes. Parte de esa protección para con mis pacientes es vacunarme contra enfermedades prevenibles con vacunas para que estos no enfermen.
No creo que puedas animar a alguien a vacunarse, si no estás dispuesto a vacunarte a ti mismo. Si yo puedo decirles a las personas con entusiasmo que recibí la vacuna como una nueva madre que amamanta a su bebé, esto podría ayudar a que otras mamás se sientan cómodas y seguras para recibir la vacuna.
¿Tuviste alguna duda en vacunarte?
Al principio estaba nerviosa. Quería volver a concebir y descubrí que había mucha información errónea circulando en línea sobre la infertilidad. Pero luego, cuando realmente lee esos artículos, descubres que los datos que dan son información engañosa o falsa. No hay evidencia que la respalde.
Cuanta más investigación hice de fuentes confiables, más segura me sentí. Aprendí que estos tipos de vacunas se han investigado por mucho tiempo. Y me enteré de que no hay pruebas que respalden la idea de que las vacunas causen infertilidad.
Y afortunadamente, tengo un médico en el que realmente confío. Pude acercarme a él con mis preguntas, sin sentirme mal por cuestionar algo nuevo. Hablar con él con franqueza me ayudó a tener confianza en mi decisión.
¿Qué más influyó en tu decisión de vacunarte?
Estaba preocupada por los posibles efectos secundarios de la vacuna mientras cuidaba a mi hija. Pero luego pensé, “si estoy tan preocupada por los efectos secundarios de tan solo un día, ¿cómo se compararía eso con mi capacidad para cuidar de mi hija si me enfermara con COVID-19?” Incluso, un caso moderado de COVID-19 podría afectarme durante semanas o meses. No podía arriesgarme a enfermar así. Prefiero tener los efectos secundarios leves de la vacuna que cualquiera de los efectos mayores provocados por el COVID-19.
¿Cómo fue tu experiencia con la lactancia materna después de vacunarte? ¿Cambió algo?
Quería poder darle los anticuerpos a mi hija, quien tenía nueve meses de edad en ese entonces. Vacunarme me quitó un gran peso de encima porque sé que mucho tiempo tiene que pasar para que ella pueda vacunarse. De hecho, me encanta la ciencia de esto. Después de mi vacuna, bombeé mi leche y la comparé y vi un cambio de color, lo cual es normal. Hay mucha explicación científica sobre por qué tu cuerpo hace lo que hace. Mi cuerpo fue activado por mi propia respuesta inmune y sabe proteger a mi bebé.
Estoy emocionada de recibir mi dosis de refuerzo de la vacuna, ya que será otra forma de darle a mi bebé más anticuerpos para protegerla.
¿Cuál es tu consejo para otras personas embarazadas o en lactancia en proceso de valorar su decisión de recibir la vacuna contra el COVID-19?
Yo animo a todos mis pacientes al 100%. Es muy difícil para mí ver a personas que tienen miedo de recibir la vacuna debido a la desinformación.
Como enfermera de parto, vi a algunas madres muy enfermas con COVID-19; lamentablemente, tuvimos un par de muertes. He estado haciendo mi trabajo durante una década y solo he sabido de la muerte de tres pacientes. Dos de estas muertes fueron el año pasado a causa del COVID-19.
La vacuna es una forma de asegurarte de que el COVID-19 no te impedirá ir a casa con tu bebé recién nacido; y de que tú y tu bebé estén a salvo del COVID-19. Es muy importante, especialmente con las nuevas variantes del virus, como la delta (artículo disponible solo en inglés), que son más comunes en bebés y niños, que las variantes anteriores.
Cuando se está embarazada, uno desea que su bebé esté lo más saludable posible. Así que uno no come pescado crudo, no bebe tanto café, elimina el alcohol, y la lista es larga. Recibir una vacuna contra una enfermedad prevenible es algo que puedes hacer para proteger a tu bebé y darle una mejor oportunidad de empezar su vida de manera saludable.
¿Qué podrías decirle a las personas que planean quedar embarazadas y podrían estar preocupadas por su fertilidad?
He visto que muchos pacientes ingresan al hospital con embarazos saludables y bebés hermosos. Estos son pacientes que recibieron la vacuna a principios de año, antes de concebir.
Personalmente, me encantaría tener otro bebé. Igual voy a recibir mi dosis de refuerzo. No quiero enfermarme de COVID-19. Quiero estar viva para mi hija y para mis futuros hijos.
¿Qué debes hacer si todavía tienes preguntas e inquietudes?
Ten una conversación abierta y honesta con un proveedor médico. Está bien cuestionar la ciencia. Está bien cuestionar algo que no conoces. Esto es parte de tu responsabilidad como padre.
Comparte tus inquietudes y haz cualquier pregunta que pueda tener. Tu proveedor no está tratando de venderte algo. No es un engaño o un artificio. Su único motivo es mantenerte a ti y a tu bebé sano y salvo.
Nuestro hospital no ha tenido ninguna persona embarazada que haya tenido un resultado adverso a la vacuna, pero hemos tenido muchas personas embarazadas que han tenido resultados adversos por contraer el COVID-19.